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Dragan Džajić, nacido el 30 de mayo de 1946 en Ub, Yugoslavia, es una figura icónica en el mundo del fútbol. Considerado uno de los mejores extremos izquierdos de todos los tiempos, su carrera estuvo marcada por una técnica impresionante, pases precisos y un regate inigualable que le valieron el apodo de «el mago Dragan».
Džajić comenzó su carrera futbolística en el FK Jedinstvo, un club local de su pueblo natal. Fue descubierto por Miljan Miljanić, entrenador de las categorías inferiores del Estrella Roja de Belgrado, quien lo llevó al equipo juvenil del club. Con solo 17 años y 8 días, Džajić hizo su debut en el primer equipo del Estrella Roja en un partido contra el FK Budućnost Titograd el 8 de junio de 1963. Aunque inicialmente jugó como defensor, pronto se estableció en su posición favorita como extremo izquierdo.
Durante su carrera en el Estrella Roja de Belgrado, que abarcó desde 1961 hasta 1978, Džajić se convirtió en uno de los jugadores más importantes de la historia del club. Marcó un total de 287 goles en 590 partidos, lo que lo hizo merecedor del galardón Zvezde Zvezdine, un honor otorgado a solo cinco jugadores en la historia del club. Ganó cinco títulos de liga y cuatro Copas de Yugoslavia con el Estrella Roja, y en 1969 recibió el Golden Badge de la revista *Sport* como el mejor atleta de Yugoslavia.
Entre 1975 y 1977, Džajić jugó para el SC Bastia de Francia, donde anotó 31 goles en dos temporadas. Aunque su estancia en Francia fue breve, dejó una huella en el fútbol europeo, demostrando una vez más su versatilidad y talento en un entorno nuevo.
Džajić debutó con la selección yugoslava a los 18 años en un partido contra Rumanía el 17 de junio de 1964. Jugó un total de 85 partidos internacionales, anotando 23 goles y estableciéndose como el jugador con más partidos disputados por la selección yugoslava. Participó en las Eurocopas de 1968 y 1976, la Copa Mundial de Fútbol de 1974 y el Torneo Olímpico de Fútbol de 1964 en Tokio. Su partido internacional más famoso fue la semifinal de la Eurocopa 1968 contra Inglaterra, donde anotó un gol de vaselina contra el guardameta Gordon Banks, lo que le valió elogios de la prensa británica y el apodo de «el mago Dragan».
El gol de Džajić en la semifinal de la Eurocopa 1968 contra Inglaterra es uno de los momentos más recordados de su carrera. Con un regate y un tiro certero, superó al legendario guardameta Gordon Banks, dando a Yugoslavia la victoria y el pase a la final. Aunque Yugoslavia finalmente perdió la final contra Italia en un partido de desempate, el gol de Džajić fue un punto de inflexión en su carrera y le ganó el respeto de aficionados y expertos a nivel mundial.
Džajić recibió numerosos elogios y reconocimientos a lo largo de su carrera. En 1968, fue elegido el tercer mejor jugador de Europa por la revista *France Football*, apenas detrás de George Best. Pelé, el legendario delantero brasileño, lo describió como «el milagro de los Balcanes, un verdadero mago», y expresó su admiración por su talento y habilidad en el campo.
Tras retirarse como jugador en 1978, Džajić regresó al Estrella Roja de Belgrado como director técnico. En su primera temporada en este cargo, el club alcanzó la final de la UEFA Cup. Posteriormente, se convirtió en el presidente del club en 1998, un puesto que ocupó hasta 2004 debido a problemas de salud. En noviembre de 2003, fue seleccionado como el Golden Player de Serbia y Montenegro por la UEFA, como el mejor jugador de los últimos 50 años en el país.
En octubre de 2003, la Federación de Fútbol de Serbia y Montenegro lo nombró el mejor futbolista serbio de los últimos 50 años, por delante de otros grandes como Dragan Stojković y Dejan Savićević. En marzo de 2023, Džajić asumió la presidencia de la Asociación de Fútbol de Serbia, continuando su legado y contribución al fútbol serbio.
Dragan Džajić es más que un jugador de fútbol; es un icono del deporte que ha dejado una huella indeleble en la historia del fútbol. Su dedicación, habilidad y pasión por el juego han inspirado a generaciones de jugadores y aficionados. Su legado continúa viviendo a través de sus logros y el impacto que ha tenido en el fútbol, tanto a nivel de club como internacional.
Dragan Džajić es un nombre que evoca grandes momentos del fútbol. Su carrera, llena de logros y reconocimientos, es un testimonio de su talento y dedicación. Como extremo izquierdo, dejó una marca que difícilmente será igualada, y su influencia en el fútbol yugoslavo y serbio es inestimable.
Para los amantes del fútbol, Dragan Džajić es un recordatorio de que, con-hardería, pasión y talento, se pueden alcanzar grandes alturas en este bello deporte.
Información proporcionada por fuentes de Wikipedia, Transfermarkt y Wikidata.
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